Jose de Diego

Jose de Diego

¿Te has dado cuenta?
Serafín Alarcón

Dejen todas sus preocupaciones a Dios porque él se interesa por ustedes.
1 Pedro 5:7

¿Te has dado cuenta?
¿Has pensado cuantas son las bendiciones que Dios te ha dado? Medita y con serenidad abre los ojos del alma y veras que él ha sido autor de todas las bendiciones y favores en el libro de tu vida. Te ha dado un cuerpo saludable y aunque tiene sus achaques funciona. Una familia que te ama, que siempre están a tu disposición. Amigos fieles, esos están a punto de extinguirse, pero todavía quedan… Un trabajo, una profesión, un oficio, un carro y una casa. Y la lista seguiría sin terminar. Amados, son tantas y tantas las bendiciones que a menudo tomamos como por contado. Puede que alguien piense distinto, probablemente haya alguno que la vida no le sonría, uno que motivos pocos tendría para celebrar… Mas, si miramos la condición de otras personas que con menos recursos han logrado alcanzar metas altas, metas que parecerían imposibles y sin embargo con fe y profunda comunión con Dios se han remontado por encima de todo monte… Cuan a menudo en ocasiones caemos presa fácil de la depresión o la apatía por la vida y ser feliz, en el peor de los casos. Digo, una piedra en el camino no tiene que ser razón para caer, puede ser el escalón que Cristo ha permitido para que avancemos y crezcamos en esta complicada carrera. Una enfermedad nos puede hacer mas fuertes espiritualmente si nos ponemos en las manos de Dios confiando en su divina intervención. ¿Me entiendes? Si, una prueba nos puede hacer mas fuertes, mas sabios y sobre todo mejores creyentes. ¿Como no llorar y sufrir con la perdida de un hijo? Me imagino el dolor… ¿Cómo no sentir profunda desilusión ante la traición de esa persona que tanto amamos? ¿Cómo enfrentar la perdida de un empleo, o que nos roben el auto? No poder tener hijos, fallar en un examen, no poder darle a nuestros hijos lo que otros pueden… En fin, son innumerables las circunstancias en las que podemos fácilmente afanarnos si no nos mantenemos enfocados. Cristo tiene la respuesta. Si, CRISTO, es y debe ser nuestro capitán ante toda tormenta, ante toda prueba aunque la tierra tiemble.

¿Te has dado cuenta?
Sal 1: 1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha sentado; 2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche. 3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará. Josue 1: 5 Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé. 6 Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos. 7 Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. Apocalipsis 3: 7 Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre: 8 Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre.

¿Te has dado cuenta?
Sal 37: 3 Confía en Jehová, y haz el bien; Y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. 4 Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón. 5 Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará. 6 Exhibirá tu justicia como la luz, Y tu derecho como el mediodía. 7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. 11 Pero los mansos heredarán la tierra, Y se recrearán con abundancia de paz. 18 Conoce Jehová los días de los perfectos, Y la heredad de ellos será para siempre. 19 No serán avergonzados en el mal tiempo, Y en los días de hambre serán saciados. 22 Porque los benditos de él heredarán la tierra; Y los malditos de él serán destruidos. 23 Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, Y él aprueba su camino. 24 Cuando el hombre cayere, no quedará postrado, Porque Jehová sostiene su mano. 25 Joven fui, y he envejecido, Y no he visto justo desamparado, Ni su descendencia que mendigue pan. 26 En todo tiempo tiene misericordia, y presta; Y su descendencia es para bendición. 27 Apártate del mal, y haz el bien, Y vivirás para siempre. 28 Porque Jehová ama la rectitud, Y no desampara a sus santos. Para siempre serán guardados; Mas la descendencia de los impíos será destruida. 29 Los justos heredarán la tierra, Y vivirán para siempre sobre ella. 30 La boca del justo habla sabiduría, Y su lengua habla justicia. 31 La ley de su Dios está en su corazón; Por tanto, sus pies no resbalarán. 34 Espera en Jehová, y guarda su camino, Y él te exaltará para heredar la tierra; Cuando sean destruidos los pecadores, lo verás. 37Jehova Considera al íntegro, y mira al justo; Porque hay un final dichoso para el hombre de paz. 39 Pero la salvación de los justos es de Jehová, Y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia. 40 Jehová los ayudará y los librará; Los libertará de los impíos, y los salvará, Por cuanto en él esperaron.

¿Te has dado cuenta?
Que todo lo que tienes es deuda eterna, que no has sido solo tu el autor de tantas bendiciones. No, medita amado, amada hermana. Jesús sin duda nuevamente se inclina a nuestro oído y nos susurra gentilmente; !Buen animo! !Regocíjate! !Esfuérzate y se valiente! Levanta tu mirada a los cielos y confía… Cristo, él que había limpiado a leprosos, sanado ciegos, perdonado pecados, devuelto la vida, multiplicado panes y peces… El que tantas lagrimas ha secado nos confirma una vez mas su amor eterno. Emanuel es su nombre, Dios verdadero, amigo y consejero. El que en una noche milagrosa fue envuelto tiernamente en pañales por su madre, mas tarde pasaría a ser puesto en una cruz voluntariamente por cada uno de nosotros.

¿Te has dado cuanta?
Sal 36.7 !Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia!...

Tablitas del Señor
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